¿Paletas de Hielo para el Desayuno?

Sé que suena loco, y más con este clima impredecible, pero verás a lo que me refiero...

Hoy te traigo una pequeña "receta" (Ya ves que no soy mucho de recetas, esta es más bien una idea) Son las paletas más geniales porque ¡Son deliciosas, cremosas y nutritivas! Es un verdadero desayuno congelado, no son para comerlas por la mañana, pero podrías...

Ingredientes:

1 rajita de canela

1 taza de avena

1/2 taza de agua

2 tazas de leche

Azúcar al gusto

1 cucharadita de extracto de vainilla

1 pizca de sal

Fruta de temporada

El procedimiento es muy sencillo, es hacer un simple atole de avena, pero ligeramente más dulce que de costumbre. Se le pueden agregar leche condensada o piloncillo, a mí me encanta ponerle un poco de azúcar mascabada (Como una cucharada) para darle un sabor especial, pero lo que encuentre uno en la alacena está perfecto.

Procedimiento:

Verter en un pocillo el agua y llevarlo a la estufa a fuego alto, añadir la rajita de canela y permitir que infunda unos 3 minutos o hasta que el agua tome color. 

Después, verter la avena y revolver ligeramente, añadir la leche de inmediato o se quemará. 

Añadir entonces el azúcar, sal y vainilla, mezclar.

Remover periódicamente hasta que rompa el hervor, esto para evitar que todo se pegue al fondo o se cree demasiada espuma.

Cuando rompa el hervor, bajar la flama al mínimo y mezclar por un minuto más.

Retirar del fuego y dejar enfriar.

Cuando esté a temperatura ambiente, lo cual demorará aproximadamente una media hora, añadir la fruta elegida (Las paletas de las fotos tienen mora azul, pero casi cualquier fruta es buena: Las fresas son perfectas, la pera y la manzana saben también muy bien, pero pueden oxidarse un poquito en el congelador. El mango queda increíble cuando está bien maduro, es mi favorito. El plátano no congela muy bien y saca un juguito extraño, sabe bien, pero no me encanta para esta receta en particular).

Ahora vierte esta deliciosa mezcla en moldes para paletas, ponles el palito y mételas al congelador unas 3 horas, o hasta que estén bien firmes. Considera que al enfriarse, esta avena tendrá menos sabor dulce, así que añadir una cucharadita extra de azúcar puede ayudar.

Quedan muy cremositas y a los niños les encantan, ¡No imaginarán que su postre es tan nutritivo! En serio, pruébalas con mango, son una completa delicia ♥

Si las preparas, cuéntame cómo te fue, me encantaría saber si a otros niños también les gusta o sólo mis hijos se comen mis inventos.