domingo, 16 de marzo de 2014

Sobre quejas e historias de terror.

Sobre quejas e historias de terror.

Nunca voy a olvidar la cara aquél doctor… Su barba, sus manos peludas, su concentración extrema y su lengua de fuera. ¿Y cómo olvidarlo? Aquél día mi lindo cuerpecito fue visitado por tantas personas que perdí la cuenta, el amor propio y el pudor.
Tiempo después descubrí que eso y muchas otras cosas que yo y tantísimas mujeres sufrimos durante el embarazo, el alumbramiento y el puerperio no es algo normal o inevitable. Es algo terrible, se siente muy mal y tiene nombre. La violencia obstétrica es el maltrato que sufre la mujer embarazada al ser juzgada, atemorizada, vejada, lastimada física y emocionalmente, también se incluye el no ser respetada en sus decisiones. Escuchamos recurrentemente historias de terror del seguro, pero puede suceder también fuera de los hospitales.
Y en el caso de las embarazadas adolescentes éste tipo de violencia no sólo es más común, sino que también es mucho más intenso. Les habla la experiencia. Y como es un tema para dar duro y tupido, éste es el primer post solamente. He hecho algunos dibujos a modo de catarsis, pues nos pasan tantas cosas que una ya no sabe si reírse o llorar… así que decidí reírme ;)
Decidí que éste post es para el desahogo, me lo merezco. Y si ya te pasó, es lo mínimo que te mereces también. Pero… ¿Cómo comenzar?
Primero, todo el mundo se siente con derecho de juzgarte, de mirarte feo y hasta de regañarte. Una vez una señora completamente desconocida me regañó por no haber terminado la prepa y andar de fácil. Lo que no sabía ella (y nunca supo), es que yo ya estaba en la universidad… #SeñoraLoca.
Mi (ex)novio me dejó y desapareció mágicamente. Quería que abortara (Qué bueno que se fue).
¿Heridas? Emocionales y Físicas, para llevar.
Me gritaban majaderías en la calle. Me tomaban por prostituta o algo así.
¿Respeto a mis decisiones? ¡Ja! Ser joven como que le da una especie de licencia implícita a todos los demás para decidir por uno. Y yo de mensa que me dejé…
Y mis aventuras en el hospital: Cada vez que iba a revisión eran 3 tactos, uno del doctor y otros dos de los estudiantes, bien interactivas las clases. Y el mero día del alumbramiento ¡El mundo entero me metió mano! 4 doctores, con sus respectivos estudiantes. Emocionados porque el bebé venía sentado y, según algunos, se alcanzaban a sentir sus pompitas. ¡Hasta mi pobre bebé salió manoseado! :( Y ni hablar sobre las enfermeras y su obsesión por esterilizarme.
¿A ti qué te ha pasado? ¡Cuéntame para no sentirme sola! Y si quieres saber un poquitín más, pícale acá.
Y bueno, para no enfadarme recordando desgracias, les dejo los dibujitos de algunas de las caras que recuerdo. Ese día perdí también el glamour.
El chavo entusiasta, todo emocionado y positivo. Tocando como si fuera un gran descubrimiento.
El chavo entusiasta, todo emocionado y positivo. Tocando como si fuera un gran descubrimiento.
El doctor viejito, se ajustó los lentes para atinarle.
El doctor viejito, se ajustó los lentes para atinarle.
La 'es mi primera vez y me voy a tardar mil años picándote'
La 'es mi primera vez y me voy a tardar mil años picándote'
La doctora fría y calculadora. Creí que, siendo ella mujer, me trataría con mucho cuidado, pero NOOO.
La doctora fría y calculadora. Creí que, siendo ella mujer, me trataría con mucho cuidado, pero NOOO.
Y el doctor peludo. Me dió cosa porque tenía pelos hasta en los dedos. Yo así de O.o
Y el doctor peludo. Me dió cosa porque tenía pelos hasta en los dedos. Yo así de O.o

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